La semana pasada se hizo público el resultado de la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (CASEN), con datos recogidos a fines del año 2020 y comienzos de este año, mostrando los efectos que ha tenido la pandemia sobre el país, con un incremento de 2,2 puntos en los niveles de pobreza y pobreza extrema respecto de la última medición realizada el 2017, contraviniendo la tendencia a la baja que se venía recogiendo desde el año 2006, según este mismo indicador.
Según la Casen, en estos momentos, un 10,8% de la población se encuentra en la pobreza, mientras un 4,3% estaría en la extrema pobreza, lo que, traducido a cifras netas, muestra que en los niveles de pobreza se encuentran 2.112.185 de personas, y otras 831.232 sobrevive en la extrema pobreza.
Sin duda, las cifras y porcentajes no alcanzan a dar cuenta de la magnitud del drama humano que hay detrás.
Para clarificar cuál es la diferencia entre un segmento y otro, hay que decir que esta encuesta se basa en los ingresos de los hogares. Se considera pobre a aquel hogar cuyo gasto por integrante es inferior a la línea de pobreza, cifra que depende del costo de la canasta básica, pero que hoy bordea los 177 mil pesos de ingreso mensual si es un integrante del hogar y aumenta mientras más integrantes tenga, por ejemplo, un hogar de tres personas su línea de la pobreza está en los 382.176 pesos. Asimismo, se considera pobreza extrema el segmento de población cuyo ingreso individual no logra alcanzar los 118 mil pesos mensuales.
En Chile no todos se mojan cuando llueve
La Casen también dejó al descubierto el aumento en la desigualdad de los ingresos durante el periodo medido, arrojando que mientras, los ingresos laborales para el primer y segundo decil cayeron en 2,2 puntos porcentuales frente a la medición de 2017; para los deciles más ricos, los ingresos aumentaron en 5,5 puntos. Con esto, se amplificó la desigualdad que existía, mostrando que los ingresos de los hogares del 10% más rico del país representaron 416,6 veces lo que percibieron las familias pertenecientes al 10% más pobre. (DF, 05/06/21)
Sin duda la pandemia no nos afectó a todos por igual, lo que también se ve reflejado en los resultados de 27 de las 30 principales empresas que componen el IPSA (que es un indicador de rentabilidad de las compañías con mayor presencia bursátil) durante el primer trimestre del año, las que lograron un crecimiento de un 71% en las ganancias en relación al obtenido durante el mismo período el 2020. (DF 27/05/21). Cabe destacar que dentro de estas compañías están los principales bancos, las empresas de servicios básicos que fueron privatizadas en los ’80 y las empresas del retail, incluyendo aquellas de que se acogieron a la Ley de Protección al Empleo para desentenderse de sus trabajadoras/es durante la crisis sanitaria. También es importante señalar que apenas cinco familias, convertidas en grupos económicos, se reparten las empresas del IPSA: Luksic, Matte, Yarur, Solari, Angelini y Said. (Ver listado de empresas IPSA)
Chile tienen dos caras absolutamente opuestas, por un lado tenemos una amplia mayoría que vive con lo justo y aún menos, según arrojó la CASEN, y un pequeño sector de privilegiados, la de los súper millonarios que viven en otra realidad, que se compran autos de lujo en medio de la crisis, como lo muestra el mismo Diario Financiero (12/06/21) cuando informa sobre el aumento de la venta de Ferrari durante el primer semestre con 6 unidades, duplicando los vendidos el año pasado en el mismo período. Este auto de alta gama tiene un precio que bordea los 230 millones de pesos, equivalente a 680 salarios mínimos. El mismo medio anunció que otra marca, aún más lujosa, la Rolls-Royce, logró vender una unidad en el país de su modelo todoterreno llamado Cullinan, cuyo valor supera los 500 mil dólares, alrededor de 373 millones de pesos chilenos, unos 1.100 salarios mínimos aproximadamente.
Estos datos muestran que, si bien el aumento de la pobreza es un problema grave, lo es aún más la desigualdad abismal que persiste en nuestra sociedad como un agravio que es preciso atacar desde sus orígenes.
Durante este período de cambio constitucional en el que nos adentramos como país, se hace necesario destinar todos nuestros esfuerzos a terminar con la desigualdad. Se han abierto posibilidades de cambiar el escenario y hay que aprovecharlo, las niñas y niños, jóvenes, adultos y ancianos que habitan las cifras de la pobreza y extrema pobreza en Chile no pueden esperar más.
Recuadro
Empresas que forman parte del IPSA 2021
Soc. Química Minera de Chile S.A. Serie B
Banco de Chile
Enel Americas S.A.
Empresas Copec S.A.
Banco Santander-Chile
Empresas CMPC S.A.
Falabella S.A.
Cencosud S.A.
Banco de Credito E Inversiones
Enel Chile S.A.
Colbun S.A.
Parque Arauco S.A.
Compania Cervecerias Unidas S.A.
CAP S.A.
Aguas Andinas S.A., Serie A
Emp. Nacional De Telecomunicaciones S.A.
Vina Concha Y Toro S.A.
Embotelladora Andina S.A. Serie B
Cencosud Shopping S.A.
Compania Sud Americana De Vapores S.A.
Engie Energia Chile S.A.
Itau Corpbanca
AES Gener S.A.
Plaza S.A.
Inversiones Aguas Metropolitanas S.A.
Ripley Corp S.A.
SMU S.A.
Sonda S.A.
Inversiones La Construcción S.A.
Grupo Security S.A.
