NoticiaNoticias La Revolución Silenciosa de los Trabajadores de la Banca Bancaria Chile 22 diciembre, 2016 Fuente: ElMostrador, por ENRIQUE ELGUETA 13 diciembre 2016 Fueron los primeros en denunciar las ventas atadas de la industria y tiempo después impulsaron un cambio legal que en 2012 obligó a las empresas a clarificar el cálculo detrás de la renta variable de sus empleados. Este año lograron un fallo a su favor en tribunales, el cual establece que la fijación de metas y comisiones no responda solo a una decisión gerencial, sino sean fruto de un acuerdo con los empleados. Y, ahora, el próximo objetivo que se plantean es terminar con la venta de seguros asociados a distintos productos financieros. Con más de 10 mil ejecutivos organizados, el gremio de trabajadores bancarios ha puesto en jaque a una parte importante del modelo de negocios de la banca. No solo la eventual pronta reforma a la Ley General de Bancos supone un factor de cambio para esta industria. Desde dentro también se vienen gestando algunos cambios que, si bien no tienen el foco en la estabilidad del sistema financiero y en mayores requerimientos de capital para el sistema, sí apuntan a cambiar su modelo de negocios, al menos en parte. Es que desde hace un tiempo que los trabajadores bancarios vienen alineando una estrategia que tiene como objetivo principal disminuir la cada vez mayor variabilidad de sus remuneraciones. Agrupados en la Confederación de Sindicatos Bancarios y Afines, buscan revertir una tendencia que ha reducido la renta fija en pos de una mayor porción variable, compuesta por comisiones, premios, campañas, entre otras políticas. Fueron los primeros actores en cuestionar las polémicas ventas atadas, uno de los factores que gatilló la salida de Carlos Budnevich de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (Sbif) durante la gestión de Sebastián Piñera y, a pesar de que el regulador validó la existencia de “ventas conjuntas”, de igual manera se impuso el hecho de que los intereses y comisiones no quedaran condicionados a la mantención de otros productos o servicios provistos por la banca. La anterior responde solo a un ejemplo de varios requerimientos y demandas que han ido en ascenso. Poco después, en 2012, el Congreso despachó la Ley 20.611 con el fin de impulsar una mayor claridad en materia de remuneraciones. Alentada por la Confederación de trabajadores bancarios, dicha norma estableció que las empresas debían detallar cómo se calcularía la parte de variable de las remuneraciones, la cual era desconocida por los trabajadores. Este año, solamente hace unas semanas, el sindicato del Banco de Chile obtuvo un triunfo importante en tribunales. En julio la justicia condenó a dicha compañía a pagar una serie de infracciones cursadas por la Dirección del Trabajo, luego de que las metas y comisiones de sus empleados hayan sido fruto de decisiones gerenciales sin que fueran convenidas por ambas partes. El banco iba a acudir a la Corte de Apelaciones, pero desistió en el último minuto. Fuentes que participaron del proceso explican que ello se debió al temor de que en esa instancia se ratificara la resolución del Segundo Juzgado de Letras, lo que haría de ese fallo un precedente jurídico que podría afectar a toda la industria. Aunque sobre este último tema no ha habido cambios en dicho banco, desde esta compañía se están proponiendo nuevas modificaciones a la forma de calcular los sueldos, que la Confederación las hace propias. Ahora, el objetivo es eliminar la venta de seguros por parte de los ejecutivos, para lo cual será necesaria nuevamente la intervención de la Dirección del Trabajo. Las prácticas en discusión generan millones de dólares en ingresos a la banca. No + Seguros La Confederación de Sindicatos Bancarios está presidida por Andrea Riquelme, directora del Sindicato de Banco de Chile, el cual a su vez es dirigido por Marco Bonnefoy. Este es el gremio con mayor articulación dentro del mundo de la banca. En septiembre esta organización encargó un estudio respecto de las ventas de seguros por parte de los empleados del Banco de Chile. Sus resultados fueron exhibidos en el área de Recursos Humanos y posteriormente ante la Gerencia Comercial de la compañía, la cual se comprometió a hacer ajustes con el fin de que dicho producto no tenga tanto peso en las comisiones variables de estos empleados. Si bien depende de cada caso, Riquelme explica que solo la venta de seguros asociados a distintos productos propios del banco puede aumentar en más de 100% la remuneración de un ejecutivo, pues es el producto que tiene la mayor ponderación dentro de la parte variable de los empleados, la cual –en términos generales– alcanza a cerca del 70% los sueldos de estos trabajadores. Pero no todos están de acuerdo con su venta. En el caso del Banco Chile, se evaluó a 1.583 trabajadores, con su respectiva evaluación sobre la venta de seguro, la cual es en general negativa. Sus conclusiones apuntan a que “en los hechos, la venta de seguros es obligatoria y se ejerce una presión constante desde las jefaturas para poder alcanzar las metas individuales y colectivas en las oficinas. La venta de seguros aumenta con el tiempo y altera el resto de las actividades que deben desempeñar los trabajadores en el Banco (que pierden relevancia). Tal es la presión por superar los indicadores de venta que los trabajadores prefieren pagar de su bolsillo los seguros que ser los responsables del incumplimiento de las metas de la oficina”. “Los trabajadores se inclinan por no tener que vender seguros aunque vean mermados sus salarios, así como también se estima que no es la forma de incrementar ingresos. Es decir, se critica el modelo de ventas de seguros en sí, ya que presupone un trabajador organizacionalmente flexible (con independencia de para qué fue contratado originalmente) pero también se rechazan los mecanismos por medio de los que se pueden obtener aumentos en las remuneraciones (de tipo variables)”, dice el documento. Dicho informe tuvo buena acogida por el Banco de Chile y, pese a que el banco no quiso participar de este artículo, fuentes afirman que en la actualidad se encuentra verificando el modelo de comisiones para 2017. Uno de los temas a definir es si dicha venta será excluida definitivamente o bien será una opción voluntaria de los ejecutivos. Esas serían las opciones, auguran desde la Confederación, de lo contrario, “si continúan con esta política, los trabajadores podrían ir a tribunales. No es un producto propio del banco”, afirma Riquelme. Eso sí, ir a tribunales es algo que todavía no está en los planes. El próximo paso es la fiscalización de todos los bancos, la cual correrá por cuenta de la Dirección del Trabajo, instancia clave en el reciente fallo jurídico que favoreció al sindicato del Banco de Chile. Esta realidad supone algo transversal dentro de la industria, pues la iniciativa es apoyada por los sindicatos de Santander, Bice y Bci, entre otros, aunque contrasta con la visión general de la Asociación de Bancos, el gremio que agrupa a los intereses de la banca. Para la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (Abif), este asunto responde a una problemática de negociaciones de metas particulares de cada banco; sin embargo, en general, la banca ha apostado por la “democratización de sus productos financieros, siendo uno de estos el seguro, sobre el cual hay más acceso por parte de la población gracias a la red que proveen los bancos. Esto ha ayudado en el proceso de bancarización”, sostiene el gremio. Cuál será el criterio que pese entre ambos gremios del mundo de la banca será algo que, eventualmente, resolverán los mismos tribunales.