Más de 35 delegados de base del sindicato del Banco Itaú provenientes desde Iquique hasta Puerto Montt se reunieron este fin de semana en San Felipe (Quinta Región) para discutir las estrategias que adoptarán en el marco de ésta su primera negociación colectiva en 17 años de existencia de la institución en el país, en un proceso destinado a mejorar sus actuales condiciones laborales que se encuentran entre las peores de la banca chilena.
Al encuentro asistieron asimismo asesores y dirigentes nacionales de la Confederación Bancaria que de esta manera manifestaron su apoyo a la causa de trabajadores que por primera vez veían que en su banco –que anteriormente era de propiedad norteamericana bajo la marca Bank Boston- se reunían delegados de base a discutir su situación.
En la cita los delegados realizaron un exhaustivo análisis de la primera respuesta dada por el banco a las peticiones laborales del sindicato rechazándola terminantemente y planearon las acciones futuras en defensa de su petitorio.
Asimismo, se crearon comisiones de trabajo destinadas a encauzar la inquietud de los trabajadores acerca del futuro del proceso de negociación colectiva y asegurarles una participación protagónica en esta tarea a nivel nacional.
En la oportunidad el presidente de la Confederación Bancaria, Jorge Martínez, hizo un análisis comparativo de los beneficios de los trabajadores de los principales bancos del país ocasión en la que quedó de manifiesto la evidente debilidad del nivel de vida de los trabajadores del Itaú respecto a sus colegas de otras instituciones financieras chilenas.
Asimismo Martínez hizo un descarnado desglose de las ganancias de la banca en el país las que, según indicó, permiten sin problemas acceder a las peticiones de los trabajadores del Banco Itaú que son del todo razonables.
El secretario general de la Confederación Bancaria, Luis Mesina, llamó a desdramatizar el hecho de realizar una huelga y a prepararse para ello, en la perspectiva de que la negociación colectiva –dijo- es un trámite legal y legítimo como única manera de lograr la redistribución de la riqueza al interior de la empresa.
El aspecto legal del proceso fue abordado por el asesor ,abogado José Tomás Peralta, quien delineó la estrategia legal para aplicar en una negociación que tiene notorios aspectos de un conflicto que supera las fronteras debido a que el Banco Itaú es de propiedad de capitales brasileños, siendo uno de los más importantes de Latinoamérica. Entre los puntos que delineó se encuentra la necesidad de votar afirmativamente la huelga por un porcentaje apabullante para finalizar una buena negociación.
En este mismo sentido se recibió con beneplácito la noticia de que los dirigentes chilenos ya se encuentran en contacto con sus similares del Banco Itaú en Brasil para coordinar estrategias de acción y preparar un eventual encuentro entre ambas directivas.
Entre los acuerdos adoptados se llegó a la conclusión de que durante las dos semanas que quedan de negociación colectiva se pueden llevar adelante conductas de presión y unidad que demuestren al estamento directivo de la empresa el buen ánimo de los trabajadores tras su directiva. Entre ellos se acordó realizar trabajo lento evitando realizar trabajo que exceda lo que legalmente obliga al trabajador, reunir fondos para financiar las actividades durante la eventual huelga, preparar circulares y llevar el conflicto hacia la opinión pública.