El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) reveló el pasado domingo que los principales bancos del mundo omitieron sus controles de prevención de lavado de activos y financiamiento al terrorismo.
A través del análisis de más de 2.100 reportes de actividades sospechosas (Suspicious Activity Reports, SAR, su sigla en inglés) que los bancos enviaron entre los años 2000 y 2017 al Financial Crimes Enforcement Network (FinCEN) que depende del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, se develó que entidades como HSBC, JPMorgan, Deutsche Bank, Bank of New York Mellon y Standard Chartered realizaron diferentes operaciones con dineros obtenidos mediante corrupción, fraudes y narcotráfico, entre otras actividades ilícitas.
Según consigna el Diario Financiero, dentro de los antecedentes que publicó ICIJ, algunas de estas compañías tienen «conexiones» con bancos chilenos. El Consorcio señaló que dentro de la información se identificó «servicios corresponsales proporcionados por bancos con sede en EEUU». En esta categoría aparecen tres firmas chilenas: Banco de Chile, Banco Security y la extinta Intervalores Corredores de Bolsa. No obstante, el informe no entrega detalles del nexo.
En el caso de la firma ligada al grupo Luksic y Citibank, su vínculo sería con Deutsche Bank. Según los estados financieros de Banco de Chile al 30 de junio, la entidad tiene préstamos por $11.944 millones con Deutsche Bank.
La investigación demostró que la firma alemana instruyó a clientes de países sancionados internacionalmente como Irán, Siria, Libia, entre otros a realizar sus transacciones con mensajes claves para que no pudieran ser percibidos por parte de las autoridades estadounidesnse. Por este hecho, Deutsche Bank debió pagar una multa de US$ 258 millones en 2015.
Por su parte, el Banco Security aparece «conectado» en los archivos del caso con el banco británico Standard Chartered. La compañía con sede en Londres despidió a dos empleados que ayudaron al FBI en una investigación sobre transferencias a empresas en Sudán, Irán y Libia.
El caso también es analizado por las autoridades en Chile. El senador Felipe Harboe solicitó al presidente de la comisión de Economía del Senado, Álvaro Elizalde, citar a la Comisión para el Mercado Financiero para que aclare algunas dudas que surgieron con el reportaje de ICIJ.
«Le planteé al presidente de la comisión de Economía invitar a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) para preguntar qué medidas están adoptando en la industria financiera bancaria, para tener más información», señaló Harboe al Diario Financiero.