En un artículo reciente recopilado por la Confederación Bancaria, se hace menciona la gestión de los tres supertintendentes que actualmente se encuentran en ejercicio: Gustavo Arraigada superintendente de Bancos e instituciones Financieras; Solange Berstein superintendenta de Administradoras de Fondos de Pensiones; Y de valores y seguros comandada por Alberto Etchegaray. La nota señala que consultada la opinión de alrededor de 50 personas (todas vinculadas al mundo empresarial) sobre la gestión de estas autoridades, el mejor evaluado fue Gustavo Arraigada personero que tiene una relación directa con nuestra organización.
La verdad es que esta evaluación hecha por el mundo empresarial, no es novedad alguna para nuestros asociados. Que más se podía esperar de un sector que durante el 2005 obtuvo ganancias que superaron los US 1500 millones y que por cierto ha sido la industria que más a ganado. Además a sabiendas que son los empresarios bancarios los que pagan el sueldo del Superintendente.
Por supuesto que los trabajadores de la banca no tienen la misma visión positiva de los empresarios respecto a la gestión de Gustavo Arraigada…claro que no. ¿Cómo es posible que esta autoridad a sabiendas que la jornada laboral de los trabajadores bancarios, es de lunes a viernes autorizara a los bancos a operar los fines de semana? Y con esto pasara una «aplanadora» sobre la ley que rige al mundo laboral (CT), con justificaciones que eran “solo con fines promocionales” y cómo muy bien comprobó la Dirección del Trabajo no era cierto…estas evaluaciones dejan mucho que desear para los trabajadores.
Y bastante que desear puesto que aquí lo que está en juego, es la vida familiar y de los trabajadores bancarios. Pero los empresarios no entienden eso, por su afán de ganar y ganar sin límites pagando sueldos miserables, por largas jornadas; y tampoco lo entiende el señor Arraigada quién debiera haber actuado con más prudencia y justicia para los trabajadores de la banca sabiendo que con su esfuerzo generan la riqueza de esta industria. Este superintendente es una autoridad pública nombrada por el presidente de la república, no es del mundo privado y es por eso toda la molestia que genera en nuestros trabajadores. Pero como en este país todo funciona irregularmente a favor de los que tienen el poder económico, político y social y el sueldo de una autoridad pública lo paga el sector privado ¿qué mas se podía esperar?…nada por supuesto.
Por último queremos expresar nuestro repudio, a las buenas apreciaciones hechas por los empresarios a la gestión del superintendente Gustavo Arraigada. Nosotros los trabajadores de la banca estamos expectantes, a lo que resuelvan los tribunales de justicia respecto del recurso de protección interpuesto ante la Corte de Apelaciones. Y según sea el resultado no vamos a bajar los brazos y proseguiremos nuestras acciones con mano firme. Porque no vamos a claudicar sobre un derecho histórico como es el descanso dominical. Derecho que pertenece a lo más profundo de nuestra civilización y creencia y que es tan necesario para el cultivo de la familia y de las relaciones humanas.
¡¡ Los fines de semana son de descanso!!
