A las 11 de la mañana del miércoles 31 de octubre, una comitiva de dirigentes sindicales asociados a UNI Americas, se hicieron presentes en las oficinas de las OIT en Chile, para interponer un recurso de queja contra el gobierno paraguayo, por el despido de 327 trabajadores realizado en agosto por la empresa Prosegur Paraguay S.A., por transgredir los tratados internacionales que protegen la libertad sindical, el derecho a la sindicalización y a la negociación colectiva. En la oportunidad, fueron recibidos por Carlos Rodríguez Díaz, encargado de las actividades con los trabajadores del organismo internacional, quien acogió el recurso de queja y salió a saludar el accionar de los dirigentes sindicales chilenos apostados con banderas y lienzos en las afueras del edificio institucional.
Entre los dirigentes sindicales presentes, se encontraban la dirección sindical de Prosegur en Chile, representada por Hugo Muñoz, presidente de la federación; Victor Hidalgo, presidente sind. Prosegur Chile y Cristián Aguilera, secretario del Sind. Nacional; Juan Palma y Julio Inostroza, presidente y secretario general respectivamente de Conagra; la directiva en pleno del Sindicato Nacional Banco Ripley, liderada por su presidente, Patricio Sanhueza, entidad afiliada a la Confederación Bancaria, la que estaba representada además por su presidenta, Andrea Riquelme.
Luego de la entrega del recurso de queja, la comitiva, compuesta por una veintena de dirigentes sindicales, se dirigió a las oficinas de Prosegur Chile, ubicadas en la comuna de Renca, para informarle a la gerencia nacional de la acción interpuesta y hacerle entrega de una carta manifestando la preocupación generada por los despidos injustificados en el vecino país.
Ya en el lugar, la gerencia de la empresa de seguridad se negó a recibir a la delegación compuesta por los dirigentes sindicales de Prosegur Chile y Andrea Riquelme, miembro además del comité de enlace de UNI Americas, por lo que luego de una espera, amenizada por una bulliciosa manifestación con pitos y aplausos en el frontis de la empresa, se dio por terminada la actividad, haciendo notar por los dirigentes presentes, la nula disposición de la empresa de recibir a los sindicalistas y la poca voluntad de dialogo de todo el holding, llamando a los trabajadores a estar alertas, porque las mismas políticas aplicadas en Paraguay, las pueden aplicar en los diversos países donde tienen filiales, incluido Chile.
Prosegur, el gigante español de la seguridad, condenado mundialmente por despido masivo en Paraguay
Prosegur, el gigante español de la seguridad, ha sido objeto de los ataques de una alianza mundial de sindicatos que representa a sus propios trabajadores y trabajadoras tras despedir a más de 325 empleados paraguayos en un día. Prosegur tiene una plantilla de más de 100.000 guardias de seguridad en 13 países, la mayoría de ellos en América Latina.
Tras siete meses de negociaciones infructuosas, los trabajadores paraguayos afiliados a SITEPROPASA fueron a la huelga para obligar a la empresa a abordar problemas económicos y relativos a la salud y seguridad y a otras condiciones de trabajo inaceptables. Al cabo de 10 días de huelga, la empresa pidió al sindicato que volviera a la mesa de negociación. Asumiendo que se trataba de una invitación de buena fe a la negociación, los trabajadores pusieron fin a la huelga y retomaron sus puestos de trabajo. Cuando volvieron al trabajo fueron despedidos de inmediato.
UNI Global Union, el sindicato mundial para los trabajadores del sector de la seguridad, convocó una conferencia urgente de sindicatos de seguridad que representan a trabajadores de Prosegur en todo el mundo. Este grupo, la Alianza de UNI en Prosegur, aprobó una resolución que condena estas acciones y pide a la oficina central de Prosegur en Madrid que ordene la readmisión de estos trabajadores. UNI no ha recibido ninguna respuesta de la empresa.
La Secretaria Regional de UNI Américas, Adriana Rosenzvaig, dijo: «La actuación de Prosegur es escandalosa y sencillamente demuestra que nadie puede confiar en esta empresa. Lo peor del caso es que parece ser que Prosegur piensa que puede salirse con la suya porque se trata de Paraguay, un país con un gobierno de granujas que no ha sido elegido y que subió al poder por medio de un golpe de Estado en junio».
José Boaventura Santos, presidente del sindicato más grande de Prosegur del mundo (CNTV, Brasil), expresó su apoyo a los compañeros paraguayos: «Simplemente no podemos quedarnos cruzados de brazos mientras nuestros compañeros y compañeras son despedidos por Prosegur por oponerse a condiciones de trabajo inseguras y degradantes».
Los sindicatos de seguridad españoles también han expresado su consternación ante el comportamiento de la empresa en Paraguay y su apoyo a los trabajadores. Como Antonio Duarte, Secretario General de USO, dijo: «Los sindicatos de seguridad en España condenan la actitud antisindical de Prosegur en Paraguay al despedir a 300 trabajadores y a sus representantes». Los sindicatos españoles han pedido que se readmita a los huelguistas y se reanuden las negociaciones colectivas.
Aunque Prosegur es una empresa española, su crecimiento en los últimos años ha sido el resultado de una actividad agresiva en América Latina. Sin embargo, este crecimiento se ha visto empañado por reiteradas acusaciones de condiciones de trabajo infrahumanas y tácticas antisindicales extremas. La oficina central en Madrid ha sido informada de la atroz actividad antisindical del año pasado en Prosegur Colombia, que sigue sin resolverse. Paraguay es el último ejemplo de comportamiento empresarial que revela una faceta de Prosegur que no se reconocería en España, su país de origen.
Lourdes Valdes
UNI americas