Frente al dictamen de la Dirección del Trabajo


DECLARACIÓN PÚBLICA ANTE DICTAMEN DE LA DT

Sin pudor ni intención alguna de guardar las apariencias, las autoridades que debieran velar por el eslabón más débil en la relación laboral, que son las y los trabajadores, transparentan sus intereses de clase, dejándonos en la desprotección absoluta en medio de la pandemia global.

El dictamen de la Dirección del Trabajo permite que los empleadores suspendan la remuneración de sus trabajadores al acatar las medidas que se están implementando desde el gobierno central para combatir el coronavirus, sin ningún tipo de indemnización, quedando en la total desprotección económica en el peor de los momentos. Por un lado le dicen a los trabajadores que se queden en casa para evitar la propagación del contagio pero por el otro, le dicen que de no acudir a sus puestos de trabajo, es legal que se queden sin sueldo, sin indemnización ni trabajo.

Este dictamen, favorece descaradamente a los grandes empresarios y viene a sumarse a otras medidas pro empresariales que ha implementado el gobierno en sus diferentes carteras, las que demuestran una total deshumanización a la hora de enfrentar una crisis sanitaria como la que estamos viviendo.

Lo curioso es que este dictamen de la Dirección del Trabajo fija criterios basándose en el derecho civil, específicamente en el Art. 45 del Código Civil, como si se tratara de una relación entre iguales y no en las leyes del trabajo, por tratarse de relaciones laborales evidentemente asimétricas, faltando con este pronunciamiento a la razón de ser de la DT como entidad, que es preocuparse del cumplimiento de las normas laborales cuyo principio orientador debe ser la protección de las y los trabajadores.

Como Confederación de Sindicatos Bancarios y Afines, rechazamos y denunciamos la bajeza en la que han caído las autoridades en estos duros momentos, desde el Presidente de la República hacia abajo, no olvidemos que la D.T. es un servicio público descentralizado, dependiente del Presidente de la República a través del Ministerio del Trabajo y cuya directora, es de exclusiva confianza del primer mandatario.

Situación que tendremos muy presente una vez terminada la crisis y sigamos con el proceso de cambios necesarios iniciado el 18 de octubre pasado.

Por lo pronto, les exigimos a las autoridades de gobierno una actitud ética pensando en el bien país y en el bienestar de todas y todos los ciudadanos que lo conforman. Que no hagan recaer en la mayoría de la población, que corresponde a la clase trabajadora, los costos de la tragedia global que estamos viviendo.

Confederación de Sindicatos Bancarios y Afines