Durante la mañana de hoy, la presidenta de nuestra organización, Pamela Henríquez, junto Pablo Hidalgo, director nacional encargado de Relaciones Internacionales, expusieron en la Comisión de Ética de la Convención Constitucional a nombre de la Confederación de Sindicatos Bancarios y del Sector Financiero. A continuación compartimos lo expuesto en esta oportunidad.
Presentación de la Confederación de Sindicatos Bancarios y del Sector Financiero ante la Comisión Transitoria de Ética de la Convención Constitucional
I. Presentación
Valoramos permitir presentarnos ante esta Comisión, es uno de los primeros espacios que se abre a la sociedad civil, organizaciones sociales y sindicales, espacios de participación respecto de los cuales tenemos la convicción que se profundizarán y ampliarán con el avance del proceso constituyente. Se preguntarán por qué solicitamos presentarnos ante esta Comisión Transitoria cuyo fin es establecer un Comité de Ética, Probidad, Transparencia, Prevención y Sanción de las Violencias, de carácter permanente, y Estructura del reglamento de ética y convivencia. Antes de dar una respuesta, nos presentamos:
La Confederación de Sindicatos Bancarios y Afines es una organización de trabajadores con décadas de historia y lucha. El origen de nuestra organización se dio en medio de grandes movilizaciones de los trabajadores del sector bancario por defender sus derechos. Este mismo ideal es el que nos
convoca a exponer ante la Convención Constitucional.
Actualmente, somos la organización sindical de mayor jerarquía que representa a las y los trabajadores del sector financiero. Contamos con dirigentes sindicales de los bancos más grandes del país y entendemos la dura situación en la que está el mundo del trabajo en este minuto. Recientemente publicamos una investigación sobre los efectos que tendrá la tecnología en el mundo
del trabajo, que pondrá a las y los trabajadores en un escenario nunca antes visto en la historia de la humanidad. Este cambio epocal ocurre en medio de una pandemia que ha obligado a miles de personas a trabajar desde sus casas, precarizando aún más las endebles condiciones laborales que existen en nuestro país y haciendo retroceder, de manera evidente, la participación de las mujeres en el mundo del trabajo.
Como organización hemos impulsado diversas luchas, tanto en las calles como en instancias institucionales. Somos fundadores de la Coordinadora No + AFP, agrupación que busca un cambio radical en el sistema previsional chileno con el fin de obtener la dignidad que nos fue arrebatada desde la dictadura. También hemos buscado por todos los medios el restablecimiento de la negociación ramal, medida que no solo le otorga más poder a la clase trabajadora, sino que también es un elemento central en las políticas de distribución de la riqueza. Venimos a esta instancia a hacer eco de la voz de las y los trabajadores, que por diversas circunstancias, lamentablemente, no están representados en este espacio, a pesar de que fuimos actores centrales en la revuelta popular de octubre de 2019 que propició el cambio de la Constitución. El 12 de noviembre, días antes del Acuerdo por la Paz, participamos de la paralización productiva más
importante desde la vuelta a la democracia, que involucró a miles de trabajadores y trabajadoras de diversos sectores. En aquel momento demandábamos una Asamblea Constituyente para remover los cimientos del sistema neoliberal para construir un nuevo Chile.
A casi dos años de esa fecha, seguimos luchando por hacer que nuestra voz se escuche en todos los espacios posibles y no vamos a retroceder en este momento histórico, donde las y los trabajadores nos encontramos en una situación límite, con sueldos miserables y políticas que no le permiten tener más poder a los sindicatos para poder negociar en condiciones razonables con los empresarios.
Esperamos que este momento político, signifique también una reparación por parte del Estado con las y los trabajadores, quienes finalmente somos los que generan la riqueza de este país. En este momento tan sensible, esperamos que esta Convención escuche de manera atenta las propuestas que presentaremos a continuación.
Desde nuestra experiencia y conocimientos les ofrecemos los siguientes lineamientos/ directrices que, junto con otras orientaciones expuestas por las y los diversos actores que se han presentado ante
ustedes, deben ser recogidas y tenidas en cuenta para realizar su trabajo, incluida la confección del reglamento de ética y convivencia; de prevención y sanción de la violencia política y de género, discursos de odio, negacionismo y distintos tipos de discriminación, y de probidad y transparencia en el ejercicio del cargo.
1.- Se tienen que establecer reglas claras para motivar y asegurar la convivencia y la colaboración dentro de la CC. Tener legítimas diferencias ideales e intereses diversos, incluso contrapuestos, en
cuanto al rol del Estado, garantía de derechos, etc. no debe ser motivo para alterar y transgredir el diálogo democrático y respetuoso que se debe dar en la Convención. Las diferencias de clases sociales,
raciales, de género, etc. no pueden justificar la violencia, agresión e intolerancia. Como dirigentes sindicales, sabemos de reconocer el conflicto de intereses y obrar en la diferencia, pues eso es lo que hacemos: a veces nos enfrentamos a la patronal como adversarios pero así como hacemos eso, también debemos trabajar colaborativamente con los empleadores. De modo que no invitamos ni los incentivamos a tratarse como hermanos en todo momento, las y los invitamos a que defiendan las diferencias y convicciones que los han traído hasta acá para redactar la Nueva Constitución para Chile, que se relacionen como adversarios cuando corresponda, que se respete la pluraridad, las justas diferencia, lo que importa es que exista un marco de respeto entre las y los actores sociales y sectores que aquí se ven representados. En este punto no basta que existan normas que impidan a través de sanciones conductas contrarias a la ética, es relevante contar con normas que castiguen y prohíban discursos o apologías de odio, sino también negacionismo, racismo, discriminación de todo tipo, pero no hay que olvidar concentrarse en el trabajo de prevención y promoción del respeto mutuo, convivencia sana, libre de todas las
violencias que permitan hacer de este espacio un espacio de diálogo democrático que esté a la altura de lo que el pueblo espera de ustedes. Si es necesario capacitar y formar a las y los convencionales en materia de DD.HH., convivencia pacífica, entonces habrá que hacerlo,
2.- La convivencia no se puede agotar en el trato humano entre las y los convencionales constituyentes, la nueva constitución debe ser discutida y creada en un espacio libre de violencia laboral y respeto y protección a los derechos de todos y todas quienes trabajan acá. Incluyendo a aquel trabajador/a que abre y cierra el Ex Congreso, sus asesores, quienes trabajan en la limpieza y ustedes mismas/as. Todo el grupo humano que participan en el desarrollo de la CC deben ser reconocidos como sujetas y sujetos titulares de derechos, sin importar el tipo de vínculo contractual que los una al proceso. Tan notorio y evidente es que en la CC no existe la voz de trabajadores/as organizados colectivamente
que se ha presentado con un orgullo el hecho de que las jornadas de trabajo sean largas y extenuantes. Sin embargo, se está burlando el derecho a descansar, resguardo del derecho a la privacidad, espacios familiares, jornada, condiciones de higiene y seguridad, es está transgrediendo tiempo y espacios familiares, afectando relaciones humanas, impidiendo el desarrollo de labores de cuidado, etc. que debe ser considerado y ser financiado en los casos de tareas domésticas y de cuidados de ser necesario.
En otras palabras, no es posible que el espacio de trabajo que creará la NC se transgreda derechos que se pretenden resguardar en la Nueva Constitución. Esto debe ser reafirmado en el futuro Reglamento de ética y convivencia; de prevención y sanción de la violencia política y de género, discursos de odio, negacionismo y distintos tipos de discriminación, y de probidad y transparencia en el ejercicio del cargo, con el objeto de que tanto la Mesa, vicepresidencias y diversas comisiones, incluidas las personas que las lideran, establezcan obligaciones o jornadas que afecten a quienes participan del proceso constituyente, desde el Convencional Constituyente hasta el que cierra la puerta del ex Congreso diariamente.
3.- Nos gustaría agregar que el acceso a registros audiovisuales, escritos, etc. del trabajo de la CC debe ser total y oportuno, es decir, debe estar al alcance de todos y todas en “tiempo real”, para que así la sociedad pueda saber qué es lo que ocurre y se está decidiendo en la CC, no basta con transmitir en vivo, lo que es positivo, por cierto, sino que tenemos el derecho a conocer las actas de cada sesión y registro de las mismas. Este proceso lo habilitó el pueblo y tenemos el derecho a estar vigilantes e incidir en el proceso y para ello la CC tiene que poner a disposición todos los medios que sean necesarios para que se logre nuestro fin.
Confederación de Sindicatos Bancarios y del Sector Financiero
